En el oficialismo consideran que Juntos por el Cambio estará en aprietos si se niega a apoyar un programa respaldado por el FMI. Y a su vez el Fondo se encontrará en dificultades si rechaza un acuerdo votado por la oposición. Sin embargo, temen que el organismo mantenga su habitual postura de centrarse en el ordenamiento de las cuentas fiscales, en detrimento de la expansión económica.